Algunos mensajes virales aseguran que las vacunas “dañan el corazón”, pero la realidad es mucho más precisa:
Se han registrado casos raros de miocarditis (inflamación del corazón), especialmente en hombres jóvenes después de algunas vacunas de ARNm.
La mayoría de esos casos fueron leves, se trataron fácilmente y las personas se recuperaron por completo.
La probabilidad es muy baja comparada con el riesgo de miocarditis causada por el virus real del COVID, que es mucho más frecuente y más peligrosa.
Es decir: el COVID como enfermedad afecta más al corazón que la propia vacuna.
Qué debes hacer si ya te vacunaste
Si te pusiste la vacuna, lo recomendable es lo siguiente:
Escucha tu cuerpo. Si sientes molestias inusuales como dolor fuerte en el pecho, dificultad para respirar o palpitaciones anormales, consulta a un médico.
Lleva un estilo de vida saludable: buena alimentación, ejercicios y chequeos rutinarios mantienen tu corazón en óptimas condiciones.
No te alarmes por imágenes sensacionalistas. La mayoría están hechas para generar drama, no para informar.