Cada vez que veas una imagen que busca asustarte, pregúntate:
¿Quién la publicó?
¿Presenta datos o solo miedo?
¿Hay estudios reales que respalden lo que dice?
Verificar estas simples preguntas evita caer en desinformación que puede afectar tu salud emocional y física.
Conclusión
Las vacunas del COVID han demostrado ser seguras, efectivas y una herramienta fundamental para protegernos. Antes de alarmarte por publicaciones virales, busca información verificada y basada en ciencia. Tu salud merece claridad, no miedo.