Pfizer admite que sus vacunas contra la Covid provocan un ca…

Tras millones de vacunas administradas y casi cinco años de perspectiva, los especialistas del sector médico han podido señalar varios efectos adversos, como hipertensión arterial, miocarditis/pericarditis, alergias o incluso sangrados menstruales abundantes.

Hasta hoy, muchas personas, incluidos científicos, no están de acuerdo con la idea de que la vacuna contra la Covid sea el origen de varias enfermedades. Sin embargo, un estudio demostró hace unos meses que la vacuna utilizada contra la Covid-19 puede provocar efectos secundarios graves.


Un estudio sobre más de 99 millones de personas (7/10)

El estudio fue realizado por el Global Vaccine Data Network sobre más de 99 millones de personas. Ocho países participaron en este proyecto (Argentina, Australia, Canadá, Francia, Dinamarca, Finlandia, Nueva Zelanda y Escocia), y los resultados fueron publicados en la revista Vaccine.


Las palabras de los investigadores (8/10)

«La mayoría de las personas vacunadas tenía entre 20 y 59 años y el mayor número de dosis se administró en Francia», explicaron los investigadores, quienes precisaron que las vacunas procedían de los laboratorios Pfizer, Moderna y AstraZeneca. Los resultados obtenidos no tranquilizaron a los profesionales de la salud, ni mucho menos a los pacientes.


El síndrome de Guillain-Barré y la trombosis venosa (9/10)

Los investigadores observaron un aumento del número de casos de síndrome de Guillain-Barré, así como de trombosis venosa cerebral, tras la inyección de la primera dosis de la vacuna de AstraZeneca.
El síndrome de Guillain-Barré se caracteriza principalmente por una debilidad muscular, mientras que la trombosis venosa es la formación de un coágulo sanguíneo en una vena, lo que impide la correcta circulación de la sangre en el cuerpo. La estrella francesa de la NBA, Victor Wembanyama, se vio afectado por este último caso hace unos meses, lo que le obligó a poner fin a su temporada.

Se necesitan más investigaciones (10/10)

Además, todas las vacunas aumentaron de forma «significativa» el riesgo de miocarditis y pericarditis (inflamación que afecta al miocardio, el músculo responsable de la contracción del corazón y de la circulación sanguínea en el cuerpo).
«Se han identificado otras alertas que requieren un examen más profundo», se puede leer en la revista. Los investigadores insisten en que se necesitan más estudios para comprender el vínculo entre la vacuna y estos efectos secundarios.