2. Preparar la mezcla seca
En un bol grande, mezcla la harina con todas las especias. Esta es la clave del sabor estilo KFC. Puedes guardar una parte para rebozar dos veces y lograr mayor crocancia.
3. Empanar
Retira el pollo del marinado (sin secarlo), pásalo directamente por la mezcla de harina y especias, presionando bien para que se adhiera.
(Opcional: vuelve a sumergir en la leche y reboza de nuevo para más crocantez).
4. Freír
Calienta el aceite a 170-180°C. Fríe el pollo por tandas, de 12 a 15 minutos o hasta que esté dorado y bien cocido por dentro. Escurre sobre rejilla o papel absorbente.
Consejos secretos del estilo KFC:
El doble rebozado (harina–leche–harina) da esa textura grumosa y crujiente.
No muevas el pollo apenas lo pongas en el aceite, así se forma bien la costra.
Usa harina de trigo común (sin maicena ni pan rallado) para ese rebozado típico.
Las especias son clave: el ajo, pimentón, mostaza y tomillo imitan el sabor original.
